VISITA CULTURAL

 Hace un mes, el doce de octubre fuimos a casa mi madre, a Figueres, de hecho creo recordar que fue la última vez que fuimos ya que después impusieron el confinamiento perimetral los fines de semana por lo que ir a casa mi madre no es opción.

 Ese fin de semana lo aprovechamos, había el aniversario de la Iglesia de Sant Pere, es la Iglesia más antigua de la ciudad, no podía dejar pasar la oportunidad, visitar la iglesia, a oscuras, solamente iluminada con velas, concretamente seis mil velas.

Era un recorrido único, y toda la iglesia estaba llena de velas, en cada una de los diferentes altares había una escena hecha con velas. Había uno que hacía referencia a los juegos olímpicos, en otra parte había uno que hacía referencia a un pez, al lado de la pila bautismal habían unas velas azules que representaban el agua.

La verdad es que para mi a parte de ser un templo y un lugar de culto es donde pasé gran parte de mi adolescencia, y ahora viene cuando me decís, que hacíais tu en una iglesia? pues la verdad es que rezar poco.


El padre de mi amiga Montse, una de mis mejores amigas hasta el momento, era el encargado de abrir y cerrar la iglesia, ayudar en la eucaristía ahora me ha venido, era el sacristán por lo que yo iba con ella, la acompañaba ha abrir la iglesia, ha cerrarla, y alguna vez por no decir muchas había subido al campanario.

Por lo que cuando entramos, después de hacer cola, Gala iba en una mochila, no pude evitar emocionarme.

Anteriormente había ido a la misa de Navidad, pero esta vez me emocioné, vino a mi cabeza mis tardes de verano sin fin, mis charlas en la escalera, nuestros sueños, y algunas campanas los días de clase que menos me gustaban.








Esa Iglesia fue testimonio de mi adolescencia, anhelos, sueños, primeros amores y desengaños.

La visita me gustó, el silencio que lo envolvía con un manto de misterio, en el exterior soplaba la tramontana, bendita tramontana como ha hecho de menos, por lo que el ruido del exterior hacía que todo fuera un poco más misterioso y más bonito.

Lo sé, en estos tiempos que corren debemos quedarnos en casa, dejar las cosas culturales para cuando se pueda, el próximo año ya se verá, pero no podía dejar pasar una oportunidad así, había distancia de seguridad y nos pusimos doble mascarilla por lo que creo que estuvo todo bastante controlado.

Actualmente estoy en estado de hibernación por lo que ya llegará la primavera y volveremos ha hacer planes y a ver a mi familia y amigos

Comentarios

  1. ¡Hola!
    Conozco la iglesia pero de día, y si ya es fascinante entonces, creo que poder hacerlo a oscuras solo iluminada por unas velas, debe ser una experiencia maravillosa, y más si es en silencio.
    Ais amiga, es normal que con lo que tenemos encima pensemos en "esos tiempos mejores". Aunque la cosa creo que va para largo y no soy de la que opina o quiere que todo siga igual, cuando digo igual me refiero como antes, sí tengo la esperanza que vendrán tiempos mejores.
    Así que por el momento, si podemos, no renunciemos a esas pequeñas cosas que nos encontramos por el camino.
    Besotes

    ResponderEliminar
  2. Hola primera vez que leo un relato tan interesante que suceda en una iglesia jajaja y más porque te trae bonitos recuerdos y no precisamente por rezar. Enhorabuena que sigan tus sueños, metas y anhelos y los buenos recuerdos.

    ResponderEliminar
  3. hola! hay veces que los lugares más insospechados es en donde pasamos un tiempo que luego se convierte en inolvidable! las fotos que nos enseñas de tu visita a esa iglesia son preciosas, me transmiten muchisima energia! besos

    ResponderEliminar
  4. Oye q cosas, jamás se m hubiera pasado q harían cosas asi

    ResponderEliminar
  5. Creo que nunca he visitado una iglesia por la noche, me daría mucha impresión...pero así con los juegos de velas la sensación sería muy distinta...más acogedora. Con prudencia se pueden seguir haciendo visitas cerca del entorno,bss!

    ResponderEliminar
  6. Hola, que bonito se ve con todas esas velas alumbrando, tuvo que ser impresionante y mas cuando tantos recuerdos tienes de ese lugar. Esperemos que todos podamos movernos con libertad muy pronto para poder visitar esa maravilla. Besos.

    ResponderEliminar
  7. Hola
    A mi me gusta que las iglesias también se utilicen para eventos así. Es una manera de mover a la gente y ofrecer cosas interesantes. La verdad es que tenía que ser todo un espectáculo para la vista. Y más en tiempos en los que los eventos culturales son más bien escasos.
    Besotes

    ResponderEliminar
  8. Hola Divina!
    En estos tiempos en que nos lo han quitado casi todo, un poco de cultura no viene nada mal. No había oído nunca una cosa tan original como esta celebración de las luces. Tuvo que ser muy chula al natural. Gracias por enseñarla.
    Un beso.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Gracias por comentar esta entrada! muxus