Madrid siempre me ha
gustado, y quedar con mis amigos me gusta todavía más, nos levantamos por la
mañana y desayunamos, el hotel tiene un buffet bastante interesante y el
desayuno no está nada mal, cuando acabamos de desayunar nos subimos al coche y
ponemos los datos en el gps, seguimos las indicaciones y llegamos a la primera,
es un barrio a media hora del centro y por suerte no existe la zona azul ni la
zona verde, no me lo puedo creer, aparcamos el coche nos acercamos al supermercado
y compramos una botella de vino, cuando acabamos llamamos para decir que hemos
aparcado y en dos minutos aparecen Merce y Alberto, que alegría y que ganas de
verlos, la verdad es que nos vemos poco a lo mucho una vez al año pero es como
si el tiempo se parase, mantenemos el contacto por email y por whatsapp, nos
acercamos a su casa tienen un ático nuevo muy bonito y acogedor nos tomamos
unas cañas y nos ponemos al día salimos a tomar un aperitivo lo mejor de la
zona son los acompañamientos en las bebidas, cada vez que pedimos una ronda nos
ponen una ración. Como me gusta!!!!! Vamos a comer y por la tarde aprovechamos
el buen tiempo y las vistas para estar en la terraza, la tarde paso en un
suspiro anécdotas y palabras nos acompañaron y la promesa de un encuentro en
Girona, nosotros regresamos al hotel y fuimos al centro decidimos ir al centro
a cenar, esta vez al Mercado de San Antón quizás no es un sitio tan turístico
pero no le tiene nada que envidiar al Mercado de San Miguel, el sitio es más pequeño
y acogedor pero igual de bueno, de postre me tomo un mojito, tengo que decir
que me sentó fatal, en mis buenos tiempos esto no me hubiera pasado pero esta
vez un simple mojito acabo con mi persona o sea que después de esto nos
dirigimos al hotel, cogemos el metro en Sol, nos movemos como pez en el agua,
en nuestra ciudad nunca hemos subido en el transporte público i en cambio aquí
ya dominamos el metro y sus combinaciones. Por hoy ya hemos tenido bastante
mañana nuestro último lo vamos aprovechar al máximo.
Nos levantamos pronto,
queremos aprovechar el último día en la capital, desayunamos y nos vamos al
Prado aprovechamos la mañana viendo cuadros, vamos a comer al barrio que hay
cerca del museo y luego vamos a ver una exposición en el CaixaForum. Por la
tarde hemos ido al Retiro y para acabar el día hemos visto la puesta de sol
desde el Palacio Real y hemos cenado en el restaurante de chicote ha hecho un
tiempo totalmente primaveral casi casi rozando temperaturas veraniegas.
Volvemos a casa cansados pero contentos con ganas de volver,
Contentos nos hemos
podido hacer fotos en el centro de la Gran Vía sin coches cosa poco usual pero
para nosotros habitual gracias a las procesiones y nos hemos podido acercar a
la Cibeles y fotografiarla de cerca casi le he podido sacar el lado bueno.
La vuelta a casa siempre
se hace pesada pero volvemos contentos esperando volver a tener unos días
libres para poder repetir otra escapada
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Gracias por comentar esta entrada! muxus